Monday, February 11, 2008

El caballo que no se quemó

Hace un tiempo soñé con caballos que se quemaban. Mi amigo Vlady me prestó un libro escalofriante sobre guerras. Libro del cual no recuerdo el nombre sólo la sensación absoluta del terror de sus páginas. Los caballos de los soldados corrían para todos lados convertidos en antorchas quejumbrosas. Eran como los caballos del apocalipsis, estrellándose contra árboles que terminaban ardiendo con ellos. Al fondo, al final, estaba un caballo blanco apacible, casi mágico que no perdía la calma y parecía decir estamos a salvo. Por eso mis pinceles lo trajeron aquí mucho antes, el arte es metafísico, este es el caballo que no se quemó.

la lámpara azul

la lámpara azul